Como las aves migratorias, al llegar el mes de noviembre muchas subespecies de pajarracus photographicus ponen rumbo a París buscando un oasis en que coger fuerzas para pasar el invierno. El abrevadero principal se llama ParisPhoto, y este año se ha trasladado al majestuoso Grand Palais, haciendo que esta feria que reúne algunas de las más importantes galerías de fotografía sea más compacta y agradable.
A la izquierda una foto de Nadav Kander recién sacada del horno, y a la derecha fotos del último libro de Mona Kuhn, Bordeaux Series, que se puede entrever en la esquina inferior derecha, junto al muy interesante libro de Michael Wolf Tokyo Compression Revisited.
Parte de la serie HandPrint Portraits, Johannesburg del artista sudafricano Gary Schneider, que continúa con su proyecto de retratos a base de peculiares fotogramas sobre emulsión fotográfica de las palmas de las manos, esta vez de otros artistas como Mikhael Subotzky, Jo Ractliffe, Roger Ballen o Senzeni Marasela.
Dos chicas contemplan la foto Sans Titre I de la serie Les Ailleurs de Christian Courreges.
Fotos de Ishiuchi Miyako de su serie Endless Night, en la galería The Third Gallery Aya. Otros buscaban crear un ambiente más íntimo dejando a un lado la pared blanca:
Una famosa foto de Venecia de Christopher Thomas.
Imprescindible en todo buen stand, unas flores, un nivelador, folletos, y, por supuesto, fotos, en este caso, un fotograma de Garry Fabian-Miller.
Pero no sólo de fotografía contemporánea vive el fotógrafo, así que también podemos encontrar copias de época, como este famoso Autorretrato con Leica (1931) de Ilse Bing…
… o el no menos famoso retrato de Vladimir Mayakovski de Alexander Rodchenko de 1924, aquí acompañado por el retrato del jugador de baloncesto Lew Alcidor (posteriormente Kareem Abdul-Jabbar) de Richard Avedon, fotografiado en 1963, (maravillosa yuxtaposición, a fe mía) y dos fotos paradigmáticas de William Eggleston: Greenwood, Mississippi, de 1973, y Memphis, de 1969-70. Como casi todas las copias por transferencia de pigmentos, las fotos de Eggleston son una delicia en primera persona.
Pero se puede también viajar a tiempos más lejanos y lugares más remotos, y contemplar los calotipos, en este caso los negativos sobre papel a la cera, de Louis De Clercq, de 1859, primeras fotos de la Vía Dolorosa de Jerusalem.
También se puede, después de contemplar el maravilloso retrato de Samuel Beckett tomado por Steve Schapiro durante el rodaje de «Film» en Nueva York, allá por 1964…
… tropezarse con el propio Steve Schapiro, contando sus historias, esta vez con una imagen de fondo de Tina Berning y Michelangelo di Battista.
Además de las galerías, había espacio especial para mostar algunas colecciones privadas. Una de ellas, la colección Walther, recientemente abierta al público en Alemania, que mostraba fotografía moderna y contemporánea africana, como esta foto sin título de Seydou Keita de 1952-53…
… contrapuesta con fotografía europea, como esta famosa imagen de August Sander de 1914.
También había espacio para que algunas instituciones mostraran sus últimas adquisiciones. Le Musée de L’Elysée mostró diversos proyectos; la Tate Gallery acaba de adquirir la serie completa del Shashin-yo Sayonara de Daido Moriyama; y el International Center of Photography, que ha estado ampliando su colección de material gráfico de revistas y periódicos ilustrados (entre ellos, bastante material relativo a la guerra civil española).
Pero, esto no es todo. Mañana, más.