Charles Dickens, en una carta que tengo ahora delante, aludiendo a un examen que hice una vez del mecanismo de «Barnaby Rudge», dice: «Por cierto ¿se da usted cuenta de que Godwin escribió su «Caleb Williams» hacia atrás?» … Nada está tan claro como que todo argumento digno de ese nombre debe elaborarse hasta su desenlace antes de intentar nada con la pluma. Solo con el desenlace constantemente a la vista es como podemos dar a un argumento su indispensable aire de coherencia o causación, haciendo que sus incidentes y especialmente el tono en todos los puntos, se orienten al desarrollo de la intención.
Edgar Allan Poe, La filosofía de la composición, 1845
Muy bueno. Deja muy claro dónde está la brecha que se ha abierto a mediados del siglo pasado…